Educación para la Ciudadanía es el nombre de una asignatura diseñada para el último ciclo de la Educación Primaria y toda la Secundaria en España por el Parlamento Español (viene fijada por la Ley Orgánica de Educación), y que consiste en la enseñanza de los valores democráticos y constitucionales.
Una vez conocidos todos los entresijos que conlleva la nueva asignatura "Eduación para la ciudadanía", reconozco en gran parte mi rechazo hacia ella, la polémica que ha causado ha sido bastante grande en todos los ámbitos educativos, familiares y pólíticos.
La formación en valores debería haberse implantado en todo el sistema educativo, en todos los cursos y asignaturas, pero de forma transversal. Porque los alumnos han de aprender a apreciar los valores democráticos en todos los cursos y en todas las asignaturas. ¿Acaso en matemáticas vale la injusticia o la intolerancia?
Estoy muy deacuerdo con que la misión del Estado no es transmitir valores sino apoyar a las familias y facilitar su derecho a elegir el tipo de educación que desean para sus hijos.
La Educación para la Ciudadanía supone un grave perjuicio en la educación de los alumnos cuando se pretende imponer “valores oficiales”, en lugar de aquellos que creemos son comunes a toda la sociedad: la verdad, la solidaridad, la justicia, el respeto, el asociacionismo, el valor del trabajo y del esfuerzo, la honestidad política social o individual.
Estos son algunos de los puntos que me parecen que hacen muy buena referencia, además de que representan muy bien el sentimiento de rechazo hacia esta nueva asignatura recogiendo en varios apartados los puntos más importantes que trata en educación.
1 comentario:
No es un grave perjuicio, es un invento macabro.
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